domingo, 20 de enero de 2013

The Pretty Things - S.F. Sorrow

La fama precede a S.F. Sorrow, es un disco mítico, histórico y tiene con qué defenderse. Por empezar los Pretty Things son una institución, siempre un poco por detrás de los Beatles, Stones, Kinks, hoy en día tienen un verdadero grupo de fanáticos que los reivindican antes que a nadie. Primero fueron la mejor y más salvaje banda de garage de toda Inglaterra, sonando incluso más sucios y desalineados que la banda de Jagger / Richards, un poco menos prolíficos que sus congéneres en cuanto a producción discográfica se refiere, en pleno auge de la música pop hicieron un disco que ellos mismos despreciaron -por la producción a la que fue “sometido”- pero que hoy también ha sido reivindicado; Emotions.

Para la época de S.F. Sorrow estaban hasta el cuello de psicodelia, en todo sentido, estilo de vida, consumo de sustancias, vida en comunidad… y la música, por supuesto. No es el primer disco conceptual, ese mérito correspondería quizás a Freak Out! de Zappa o incluso alguien podría decir que el cetro lo merece In the Wee Small Hours de Sinatra. ¿Por qué no? Sí se puede decir que este fue el primer LP en tener una especie de guion, sin ser dramaturgos ni mucho menos, se las arreglaron para hacer que la vida de Sebastian F. Sorrow tuviese coherencia, unas cuentas observaciones sociales agudas y un montón de música fantástica, que es lo que a nosotros más nos importa. Si no fuese porque la música en este álbum es inspiradísima probablemente nadie se acordaría del hito craneado por los Pretty Things.

“Well of Destiny”… ¿querés llegar sin necesidad de viajar como decía Harrison? Ahí tenés un freak-out instrumental a la altura del Pink Floyd de Barrett o de cualquier cosa del primer -y único- disco de Tomorrow. ¿Te gusta la parte aniñada de la psicodelia inglesa? Esa que tan bien dominaban los Kaleidscope, Nirvana UK o los mismísimos Beatles, está presente también en “Trust” o “She Says Good Morning” con una marcada tendencia acústica, la guitarra otrora blusera de Dick Taylor rara vez descarga electricidad pero cuando lo hace hay que atarse fuerte los cinturones. No falta el casi indispensable himno masturbatorio, de la mano de “Bracelets of Fingers” o la parte anti-bélica en donde nuestro protagonista va a la guerra, en “Private Sorrow”, con unos redobles marciales del legendario Lou “Twink” Adler, mucho más que un baterista. Phil May también tiene tiempo de lucirse y demostrar su versatilidad y cuando queda totalmente expuesto es cuando más brilla, sobre todo en el último tema, “The Loneliest Person”.


Después de S.F. Sorrow abandonarían (relativamente) la pátina lisérgica que tiñe todo el disco por un estilo más “bajado a tierra”, para el genial Parachute. Pero acá le abrieron la puerta a Ray Davies para Arthur y ni hablar a Townshend con Tommy, que convertiría a The Who en super-estrellas mundiales casi de la noche a la mañana. Pero como suele suceder… alguien tenía que pavimentar el camino.






Chequear también:

The Pretty Things - Get the Picture?
The Electric Banana - Even More Electric Banana
The Pretty Things - Philippe de Barge [semi oficial]

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...